La (mala) educación.
Vivimos en una ciudad sucia. ¿Por qué?
Todas las mañanas una legión de máquinas ruidosas se encargan de mantener un poco de orden y limpieza en nuestras calles, pero no lo consiguen.
-He visto a un niño escupir un chicle en el suelo sin preocupación alguna.
-He visto a una madre dar un dulce a una niña y tirar el envoltorio a sus pies.
-He visto a un señor mayor escupir sus babas al suelo.
-He visto a unos niños doblando un árbol joven hasta partirlo mientras sus progenitores fumaban en una esquina.
–He visto como vaciaban el cenicero de un coche en plena calle.
–He visto como dejan botes, botellas y hasta restos de bocadillos en el alféizar de una ventana.
–He visto perros defecando mientras los dueños se hacen los despistados.
–He visto dejar bolsas de basura fuera de los contenedores vacíos.
–He visto dejar una bolsa de basura en una papelera.
–He visto sacudir una alfombra por la ventana sin importar quién pasa por debajo.
–He visto tirar el agua sucia de fregar en medio de una calle.
–He visto como alimentan a los palomos para que luego estos llenen las calles con sus excrementos.
–He visto como algunos dejan sus enseres en plena calle en lugar de usar el servicio gratuito de recogida.
–He visto como un camino para pasear es convertido en un vertedero.
–He visto cómo limpian un parque, con el suelo de tierra o arena, usando una sopladora (¡!).
–He visto tirar cosas a la salida de una boda.
–He visto usar maceteros como ceniceros.
–He visto vaciar papeleras en el suelo para que lo recoja todo la ruidosa barredora (¡!)
–He visto tirar de todo en cabalgatas y procesiones.
–He visto como queda todo lleno de basura después de un botellón, o un concierto, o una cabalgata.
–He visto como quedan las calles de sucias después de un mercadillo local.
–También he visto a ciudadanos limpiando los alféizares de sus ventanas que la ruidosa sopladora de Sercomosa había dejado llenos de polvo.
–He visto a gente regando los maceteros de la ciudad que estaban secos y abandonados.
–He visto que Molina de Segura solo se limpia en fechas señaladas. Y solo las calles señaladas.
–He visto calles llenas de orines
–He visto excrementos en medio de las calles
–He visto dueños de mascotas mirando para otro lado, disimulando.
–He visto barredoras expulsando más humo que un autobús de los años 60.
–He visto a gente sacar la basura orgánica a las 8 de la mañana.
El servicio de limpieza nos cuesta demasiado. Nos sale caro, muy caro. ¡Carísimo!
¿Solución?
¡EDUCACIÓN!
Si se convence a los vecinos que la calle es suya y que hay que cuidarla como el pasillo de su casa, las calles se mantendrían limpias.
En lugar de tantas campañas dedicadas al reciclaje, que solo beneficia a los fabricantes de envases, hagamos campañas de civismo, sentido común y empatía. No usar envases innecesarios es mejor que reciclarlos. Los envases de un solo uso son los peores y entre ellos destacan las botellas de agua por la enorme cantidad que se desechan cada día. ¿Sabías que una parte de los residuos de estas botellas pasa directamente a tu organismo al beber? Piénsalo.
Recuperemos los envases de vidrio retornables. Son los más higiénicos, y los menos contaminantes.
Los comercios de comida basura son unos de los mayores productores de residuos contaminantes y de enfermedades de nuestro metabolismo. Hay que regularlas y sería incluso deseable erradicarlas de nuestra ciudad.
Podemos empezar por enseñar y concienciar a los niños y continuar con el resto la ciudadanía.
Cuando uno siente que la calle es suya, la cuida.
Cambiemos las ruidosas máquinas por escobas y recogedores. Si cuidamos las calles apenas serán necesarias. El dinero sobrante usémoslo para plantar árboles de sombra, autóctonos a ser posible, colocar bancos y fuentes públicas.
Hagamos una ciudad agradable donde dé gusto vivir. Limpia y sin ruidos innecesarios.
En Molina de Segura hay muchas cosas que mejorar: tráfico, trabajo, servicios, comercio, industria, limpieza, ordenación urbana, conservación de la huerta, educación, ocio, etc. Propongo empezar con la limpieza y la educación.
Premiar a los vecinos que mejor cuidan su calle podría ser un buen incentivo.
No se trata de multas ni de mano dura. Se trata de EDUCACIÓN.
Por supuesto, agradezco sus comentarios y críticas. Pueden dirigirse a mis teléfonos (el móvil solo para WhatsApp, por favor) o e-mail.
Gracias por leer.